Entradas

Mostrando las entradas de junio, 2022

Psicología en situaciones de desastres y emergencias

Imagen
  ¿Qué es un desastre? Un desastre es un evento inesperado, fuera de toda la norma que separa a la gente de recursos y redes de apoyo social. Provocan la interrupción de los recursos de transporte, comunicaciones, vivienda y otras necesidades básicas lo cual suele ser abrumador para las personas. Los desastres pueden atentar contra l a red de seguridad, la base de la Jerarquía de Necesidades, los bienes y servicios habituales. Ejemplos de desastres  Calor extremo. Huracanes. Inundaciones. Incendios  Sequía. Terremotos. Tormentas de nieve y hielo. Tornados. Accidentes viales Accidentes aeronáuticos Manifestaciones Atentados 911 Caracteristicas de un desastre Predecibles Puede existir una advertencia Se admite la preparación En la mayoría de los casos, en forma repentina e inesperada causando sobre los elementos sometidos alteraciones intensas, representadas por la pérdida de vida y salud de la población, la destrucción o pérdida de los bienes de una colectividad y/o daños severos sobre

Cuarta parte: El sufrimiento y la muerte para el enfermo y el profesional de la salud

Imagen
  Acompañamiento tanatológico La Tanatología es la ciencia encargada del estudio de la muerte, actualmente engloba  todo lo relacionado con la muerte, el proceso de morir, las pérdidas y el duelo, visualizando  al ser humano de forma integral, es decir, a través de cada una de las dimensiones que lo  conforman: física, psíquica, social, espiritual; así como todos los aspectos que relacionan  el pensamiento en torno a  la muerte, el morir y lo que sucede después de la misma. La forma en que cada persona percibe la muerte, es un fenómeno complejo e individual:  cómo reacciona en conjunto y enfrenta la situación en las diferentes dimensiones de su  personalidad. Así, cada persona vivirá la experiencia de muerte de manera diferente y esto  condicionará el significado que dé a tales experiencias.  Uno de los objetivos de la Tanatología es acompañar emocionalmente a la persona para  ayudarla no a “curar” o “quitar” el dolor, sino para hacerle llevadero y soportable el  sufrimiento derivado d